una se levanta un día, sabiendo, sintiendo en cada poro, que es hora de perder esos kilos de más. Y otros días, sin importar nada, te sentís capáz de comerte a un hombre sin dejarlo siquiera pestañear.
Yo que se. Me vuelvo repetitiva con éste tema. Ya lo sé. Sepan-disculpar.
Pero bueno, yo ya avisé: soy insegura. Soy mujer. Soy yo. Qué esperabas, che?
Se que las chicas en short, le gustan a mi novio. Sé que me elije a mi, por ahora, en short o en pelotas. aunque haya mujeres a las que calce mejor un short que a mi.
Ahora...Eso alcanza?
Depende.
Depende el día que tenga yo, capáz que hoy me levanté en uno de esos días en que me veo linda, y me re cago en los shorts y en las demás minitas.
Ahora. Si me levanté en un día de esos que me molestan hasta las pestañas.
Ahí si. Me hace mierda
Me siento un flan.
Un flan vencido, medio aplastado en la góndola de un supermercado chino.
Pero bueno. Es mi dilema.
Ya sé que soy simpática. Ya sé que soy algo así como inteligente. Se que se pueden entablar lindas conversaciones conmigo, y sé que soy buena persona.
Ya sé! Pero hay días, en que eso me chupa un huevo. Quiero estar buena. Que se te derrita el cerebro. Entendés?
Pero puedo, eh? Mirá que puedo ser perra, perra.
Pero el tema es ese, justamente.
Soy todo eso, y puedo ser todo lo otro. El tema es que a veces necesito que me veas como un pedazo de carne, entendés?
No hay comentarios:
Publicar un comentario