--La cabeza, cuando está desparramada al lado del cuerpo, tiene las peores ideas--.
Me enrosqué en una noche de bardo como otras que van pasando. A veces, cuando las cosas se tambalean, la cabeza se da vuelta, se te cae, y todavía es de noche.
Te hubiera mandando un mensaje de texto o te hubiera llamado. Porque me siento linda, inteligente, copada, porque estas noches son así. Te comerías el mundo si te supieras un puto celular de memoria o al menos eso imaginás.
No sé ni que número de teléfono tenés. Nunca pude aprenderme el de antes, mucho menos ese que tuviste después y que perdí con el celular que perdí otra noche no sé cuándo, que también amanecí con la cabeza en un cajón de la heladera.
Afuera
un pelotudo patea un tacho de basura. Escucho el paf fuerte de la patada, y como
ruedan cosas por la calle. Quiero salir a patear un tacho. Jugarle una carrera
al pelotudo a ver quien baja más tachos a patadas por Corrientes.
Patear tachos y ganarle al pelotudo parece un buen plan B.
Patear tachos y ganarle al pelotudo parece un buen plan B.
Total no me acuerdo tu teléfono y
los bondis empezaron a pasar más seguido y ya canta el pajarito hijo de puta
que amanece antes que el mundo.
1 comentario:
ese pajarito es el que se encarga de despertarme a diario para que vea donde amanece mi cabeza, que nunca es donde debiera.
el plan b hubiera estado bueno solo para sacarse la bronca de no recordar el numero, pero la competencia con un pelotudo no la recomiendo, nos hace facilmente mimetizables
un abrazo enorme
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